Bienvenido/a a mi newsletter.
Soy @alvaroalegriam y aquí comparto mi visión personal sobre temas que me apasionan alrededor del mundo de los negocios, el emprendimiento y el desarrollo personal.
Si a ti también te interesan, únete a los >3.000 suscriptores que ya forman parte de esta familia.
Como ya indica el título, la edición de esta semana me la he tomado como una transición. Un punto de inflexión entre la etapa anterior que terminó y la que se abre a partir de este momento. Y así te recomiendo que te la tomes tú también y que, si no te gusta esta edición un poco más personal, esperes a la semana que viene para decidir si te vas.
Cuando empecé a escribir la newsletter justo hace 3 años (agosto 2020) lo hice sin tener un objetivo claro y sin darle demasiadas vueltas a ningún aspecto.
Probablemente, di por hecho que esta aventura no tendría ningún éxito y en consecuencia, no le dediqué casi ningún esfuerzo al nombre, ni al logo, ni al diseño o la estructura… En fin a nada de lo que más tarde descubrí que si era importante.
Esa falta de planificación tuvo consecuencias y pasado un tiempo, me encontré peleándome con mi propia newsletter porque los temas sobre los que me apetecía hablar no encajaban con el nicho por el que empecé, porque el nombre era espantoso y casi nadie lo entendía, porque mezclaba información con opinión…En fin, iba como pollo sin cabeza.
La newsletter se había convertido en un pequeño desastre que ya no me representaba y en ese contexto, cometí un error. Decidí convertir esta newsletter en parte de un proyecto colectivo al que me incorporaba con mucha ilusión, porque pensé, que darle un nuevo propósito y una nueva marca haría que todo fluyera de nuevo.
Me equivocaba.
El problema es que yo escribo esta newsletter por placer, en primera persona y sobre lo que me interesa a nivel personal; lo cual no termina de encajar del todo bien con un proyecto colectivo sobre una temática concreta, en el que tenía menos libertad de temas y donde no me representaba sólo a mi. Y a esa situación se le unió lo que ya leíste la semana pasada sobre el burnout que he sufrido los últimos meses.
Resultado: semanas y semanas pensando qué hacer con la newsletter.
Tenía claro que, aunque en esas semanas no estaba encontrando la motivación para escribir, iba a ser algo pasajero y pronto encontraría las ganas para continuar. Me conozco ya suficientemente bien como para saber que tengo la necesidad de compartir mis reflexiones con el mundo y además, la newsletter tiene un efecto positivo en mi, pues me obliga a estudiar y profundizar sobre diferentes temas y ejercitar las capacidades de síntesis y comunicación.
Pero también tenía claro que esta tercera iteración tenía que ser diferente a las dos anteriores. Necesitaba hacer cambios que me permitan sentirme cómodo a largo plazo y me dieran flexibilidad para explorar los temas que me interesan.
Para esta nueva fase, quería una marca que fuera mucho más abierta y que reflejase lo más fielmente posible la naturaleza de mi contenido. Pero la verdad es que no tenía muy claro el camino a seguir así que, como con muchos otros temas, pedí ayuda en Twitter para encontrar un nuevo nombre.
Y resultó que uno de mis seguidores y amigo, Antonio de la Esperanza (@aesperies) plantó en mi cabeza una idea como las que Di Caprio ponía en la película de Origen
“Alegría por la mañana”
La propuesta de Antonio no me convenció, pero la idea de incluir mi apellido sí, por dos motivos:
porque es un elemento personal que la vincula directamente conmigo y esa vinculación encaja muy bien con el hecho de que gran parte del contenido que genero sea una opinión personal; y
Porque mi apellido es diferente y por tanto, fácil de recordar. Adiós a nombres complejos que son difíciles de memorizar y transmitir.
Pero llegados a ese punto, necesitaba encontrar la manera de encajar mi apellido de manera adecuada, porque todo lo que se me ocurría con “alegría” me sonaba naif.
Tras algunas vueltas, terminé en “Versión Alegría” que más tarde y con la ayuda de Samuel Hermoso (@sr_wilson), terminó por ser “Visión Alegría” porque “Visión” es un termino más positivo y aspiracional que “Versión” que puede entenderse como algo subjetivo o alternativo y que no en todos los contextos es algo bueno.
Una vez escogido el nombre, ahora quedaba darle forma y hacerlo plástico para construir una imagen de marca de la nueva etapa. Y aquí, de nuevo, Samuel tomó las riendas y muy rápidamente escogió esta maravillosa tipografía que convertimos en el header que ya has podido ver en el encabezado de este correo.
Y ya que la nueva etapa de la newsletter está irremediablemente vinculada a mi por el apellido, quería reforzar todavía más esa unión incluyendo dos elementos adicionales: mi cara y mi firma. Esto, no voy a mentir, está inspirado en algunas de las newsletters que más me gustan.
En mi opinión, la cara y la firma ayudan a recordar que detrás de este contenido y a pesar de que tú lo lees en una pantalla y con una tipografía digital, está creado “a mano” por una persona de carne y hueso.
Por eso, además del encabezado, cada newsletter incluirá también esta imagen al final de cada edición
Y hasta aquí, los cambios que he introducido hasta el momento y sobre los que tengo todo el control. Pero, por encima de estos cambios, hay uno que ambiciono mucho más y que depende de ti y de todos los que me leéis: convertir esta newsletter en algo más grande y sobre todo mucho más bidireccional.
En cuanto al tamaño, mi crecimiento depende de que, cada semana, compartas mi edición y me recomiendes a tus conocidos para que puedan conocer mi contenido. Como te decía antes, escribo por placer, pero no voy a ocultar que la sensación de crecer es un motivador importante. Por este motivo, voy a probar a publicar los sábados por la mañana en lugar de los martes, porque quizás alguno se sienta cohibido de compartir cosas en horario laboral.
Con referencia a la bidireccionalidad, me encantaría evitar esa sensación de eco que he tenido con algunas ediciones donde no he recibido ninguna reacción y me he sentido hablando sólo. Me encantaría que, siempre que te apetezca, me comentes que opinas sobre cada edición. A mi me ayuda a saber que hay alguien al otro lado y aprender contigo y sobre ti. En cuanto a esto, la semana pasada pude notar ya un cambio importante por las respuestas que recibí en el post, los correos que me enviasteis y los mensajes en X.
Así que, si te ha gustado esta edición, puedes hacérmelo saber con dándole a me gusta 💛 y compartiéndola por email o redes sociales con otras personas pulsando el siguiente botón
La semana que viene empezamos la nueva etapa con un tema sobre el que me apetece bastante profundizar: Community-Driven Products
Gracias por leerme
Nos vemos en 7 días.
Un abrazo,
Deseando leer esta nueva etapa!
Previo dividiría en 3 momentos. Primera etapa desde el inicio hasta el post en el que la liaste diciendo que estabas en apuros <<es la etapa que más he disfrutado como lector>>. La segunda etapa después de ese articulo hasta la asociación con el proyecto <<no conseguí engancharme en esta etapa>>. Y la tercera etapa con la asociaste al proyecto <<perdí todo el interés por leerte>>
En lo que llevas de nuevo, me han gustado las dos entregas :)
Genial Álvaro,
Creo que es un cambio acertado y que supone una abrir una nueva etapa muy interesante.
!A por ello!